“Todas
las mañanas al salir el sol, nos levantamos las madres a trabajar con mucho
amor”; es la frase que decenas de madres comunitarias, en compañía de padres y
jóvenes cantaban por las calles de Sevilla el miércoles 29 de marzo del 2017.
En
sus rostros preocupados se observaba la incertidumbre por la decisión que
tomara la corte constitucional frente a la sentencia T 480 del 2016, que las
madres comunitarias habían visto como un logro en el camino del reconocimiento
de sus derechos como trabajadoras; pero que hoy se ve en riesgo debido a que la
directora del ICBF Cristina Plaza y el Presidente Juan Manuel Santos consideran
que dicha sentencia de la corte y el proyecto de ley que provino posteriormente
de este, violan el principio de sostenibilidad fiscal que ha caracterizado la
política Neoliberal de las últimas tres décadas en nuestro país.
Al
tomar con mi celular las fotos de las madres comunitarias marchando por las
calles del municipio, observaba en ellas claramente sus cabellos blancos y las
arrugas en su rostro que describían toda una vida de entrega y amor a los hijos
de este terruño; y personalizaban también a los transeúntes que las observaban
con una frialdad que refleja una sociedad poco solidaria e incrédula de las
posibles transformaciones sociales que el presente puede traer para el país.
Al
llegar al parque de la concordia las madres lideres toman la palabra con un
carácter que nos podría recordar al gran líder y orador Jorge Eliecer Gaitán
que aun lado las observaba sin que ellas lo notaran, y que en su momento lleno
la plaza de toros y las calles de Bogotá denunciando el país político de las
élites gobernantes que con sus actos antipopulares construyeron una gran franja
que les separaba del país nacional y que sumió al pueblo en un desangre sin
fin, que hoy después de más de 60 años estamos tratando de superar.
En
las palabras de las oradoras se reiteraba permanentemente que en Sevilla nos
debe unir la defensa de los derechos humanos, la defensa de las madres
trabajadoras y que la respuesta del estado colombiano a las miles de mujeres
que han entregado sus años de vida a la causa de nuestros niños(as), no debe
ser la violación del derecho a su trabajo, sino el enaltecimiento de su labor
como guardianas de la vida, y sembradoras de sonrisas; que son y serán siempre
necesarias en una sociedad que busca enterrar la antigua Colombia de la
violencia y la exclusión, para transitar a la Colombia de la Reconciliación y
la Esperanza.
Escrito
por: Jhon Freddy Grisales.
-Movimiento
de Estudiantes y Egresados de Secundaria –MOVERSE-
-Marcha
Patriótica Sevilla.