La CVC y la Universidad de Caldas ejecutaron el
convenio, que también benefició a una Institución educativa, con la que se
realizó transferencia de tecnologías sostenibles para la generación de energía
en las veredas Miraflores y El Tibi, en zona alta de la cuenca del río
Bugalagrande.
Para 24 familias de la zona rural de Sevilla se
acabó la iluminación con velas, la desconexión de la vida moderna y lo peor, la
extracción de madera para obtener leña que afectaba el bosque, todo, gracias a
la entrega de sistemas solares fotovoltaicos por parte de la Corporación
Autónoma Regional del Valle del Cauca (CVC) y la Universidad de Caldas.
Estos campesinos de las veredas Miraflores y El
Tibi, en zona alta de la cuenca del río Bugalagrande, pasan por grandes
problemas de seguridad alimentaria por lo que se veían obligados a
sobreexplotar el recurso bosque amenazando la oferta ambiental en esta zona.
Por tal razón, la CVC y la Universidad de
Caldas ejecutaron un proyecto enfocado al uso de energía solar fotovoltaica
(paneles solares). Se trata de una tecnología que cada vez ha tenido mayor
acogida por ser considerada limpia, sostenible y libre de emisiones tóxicas
tales como gases de efecto invernadero.
Así se ejecutó el proyecto
El convenio se dividió en dos ejes
fundamentales, primero, la instalación de los sistemas de energía fotovoltaica
y como segundo eje, la educación ambiental a través de capacitaciones para el
fortalecimiento organizacional de la comunidad, para la operación y
administración de los sistemas de energía.
En total se instalaron 25 sistemas solares
fotovoltaicos de 270 vatios, uno para una institución educativa y 24 para familias
distribuidas, 17 en la vereda Miraflores y
ocho en la vereda El Tibi.
“Estamos muy agradecidos con la CVC porque nos
ha orientado cómo podemos conservar el medio ambiente y la fauna asociada en
esta zona de bosque de la cuenca del río Bugalagrande. Además, con la
instalación de los paneles solares, hemos mejorado nuestra calidad de
vida, pues antes, todo era a la luz de
una vela, y ya con esta tecnología podemos realizar cosas básicas como tener
radio o cargar el celular”, dice Reinaldo Bautista propietario de la finca
Combeima de la vereda Miraflores, beneficiario del convenio.
Los habitantes de la zona son los encargados de
la conservación, protección y cuidado de los ecosistemas y reservas allí
presentes. Con este proyecto se mejoran sus condiciones de vida y se cubren
necesidades como la energía eléctrica y se les facilita el cuidado y buen
aprovechamiento de los recursos naturales en los ecosistemas presentes: páramo,
bosque andino y subxerofítico.
Por: Jeniffer Polanía Rincón. Periódico El
Campesino